¡Compre con los campesinos, no sean mala onda!
Diariamente, mujeres y hombres de la zona rural llegan muy temprano a la Central Camionera de Acayucan para intentar vender los productos que cosechan en el campo, con el fin de obtener recursos y llevar el sustento a sus casas.
En las afueras del mercado pueden verse a muchas canasteras que al igual que sobre la calle Flores Magón, quienes a diario instalan sus puestos para vender lo poco que pueden, pues con esto se ayudan para obtener comida y lo básico para sobrevivir, ya que en sus lugares de origen el trabajo ha escaseado y en ocasiones es mal pagado.
Un ejemplo de esto es la señora Paula Vázquez, quien es originaria de Soconusco y diariamente llega al mercado Vicente Obregón, en la terminal de autobuses de Acayucan, buscado vender sus productos que le ayudan a hacerse cargo de sus gastos en casa, pero también del cuidado de su madre, lo que también no le permite estar tanto tiempo a las afueras del mercado con sus productos, ya que debe llegar temprano a casa para atenderla.
Expresó que con la mayor problemática con la que se encuentran es que a pesar de que la mayoría de los productos han aumentado su precio en comparación con inicios de año, ellos no han podido hacer tantos aumentos como los que se realizan en negocios establecidos, ya que en lugar de pagar el precio justo por ellos, algunos clientes llegan regateando el costo, a lo que casi siempre acceden pues en la única forma en que logran venderlos.
Por otro lado, dijo que así como ella, hay personas que diariamente llegan a ese punto de la ciudad, provenientes de otros municipios o de las comunidades aledañas, queriendo vender sus productos, ya que está es la única fuente de ingresos que tienen, pues dichos productos en su mayoría son traídos desde sus lugares de origen y sembrados en sus tierras, pero al ser poco el producto que se cosecha ellos son quienes se encargan de venderlos en espacios como este, o acomodarlos en pequeños comercios.
Indicó que en ocasiones las ventas son muy bajas y no logran vender todos los productos que de manera diaria disponen para vender, por lo que los llevan de regreso, aunque la mayoría de ellos no pueda ser vendido al día siguiente, o por varios días seguidos, es por ello que optan por traer cada vez menos mercancía para no correr el riesgo de perder por completo su inversión.