
«Estaba en mi cuarto, me tocó la puerta y me dijo que estaba muy triste porque no sabía nada de su mamá a la una de la mañana. Iba de esmoquin con una botella en la mano, guapísimo. Yo en pijama con los pelos parados, pero no pasó nada, porque yo lo veía como un chavito», compartió Lucía.
Después de este breve encuentro en el que no hubo ni un beso, Luis Miguel comenzó a cortejar a la actriz, quien mencionó que recibió varios regalos del cantante.
«Me empezó a buscar, a llamar, a pretender. Era muy espléndido, me daba regalos, pero algunos no los recibí (…) Era muy inteligente, muy maduro para sus 17 años, y yo creo que él empezó a vivir muy temprano», consideró Méndez.