Dijo que en medio de la pandemia por el COVID-19, en la población mexicana ha venido a incidir gravemente, el problema ya se considera un desastre sanitario porque no hay forma de resolver tantos casos de personas que tenían alguna enfermedad y se contagian del virus, resultando con consecuencias graves.
Comentó que el coronavirus ha incidido tanto en la población mexicana porque México es un país de personas con obesidad: «Ha incidido muchísimo porque nuestro país es un país de gordos, me acuerdo de las incidencias de las estadísticas del 2016, 2017, 2018, nuestro país tiene un promedio de entre 76 y 80 y tantos por ciento de obesidad y sobrepeso».
Dijo que lamentablemente México ocupa uno de los primeros lugares a nivel mundial en obesidad.
La obesidad va aparejada de muchos fenómenos inflamatorios, las células grasas, los adipocitos son capaces de liberar sustancias en el cuerpo humano que favorecen la inflamación, quiere decir estar gordo no es estar sano, sino enfermo y con una inflamación sistémica que a la postre debilita al cuerpo humano para recibir a un virus ya de por sí agresivo.
Además, dijo que la diabetes es capaz de generar un trastorno circulatorio grave, tanto es así que basta y sobra que seamos diabetes para que tengamos problemas de corazón.
Detalló que si una persona obesa o con diabetes y se contagia de coronavirus tiene una mala expectativa, pues la mayoría de las personas que han fallecido tenían previamente algunas de esas enfermedades.
Dijo que es tiempo de cambiar nuestro estilo de vida y empezar a alimentarnos mejor para tener una mejor salud y enfrentar algún contagio.