Al menor le ordenaron ponerse de frente a un casillero, para después ser esculcado y esposado, mientras el infante lloraba.
El día de ayer circuló en redes el video del arresto efectuado contra un niño de ocho años, ocurrido en una escuela del estado de Florida. En las imágenes se observa la manera en la que el infante es abordado por un policía, que después de ordenarle que se ponga de frente a un casillero, es obligado a poner sus manos sobre el mueble y es esculcado, para luego ser esposado. Todo esto en medio del llanto del menor.
La penosa situación se originó después de que una maestra intentara cambiar de lugar al chico pero este desobedeciera sus indicaciones. La profesora, al sentirse ofendida por esa conducta, recurrió a la policía, quien trasladó al muchachito a la prisión.
Si bien el suceso tiene dos años de haber ocurrido, fue apenas hace un par de días que se diera a conocer la grabación, la cual al parecer, proviene de la cámara corporal de otro oficial que no sale a cuadro.
El niño cuenta con una condición de Desorden de Déficit de Atención/Hiperactividad, lo que lo lleva a sufrir períodos de depresión y ansiedad, algo de lo cual ya estaban al tanto las autoridades escolares.
La madre del pequeño, Bianca Digennaro, participó hoy martes en una videoconferencia donde dio a conocer que presentará una demanda por lesión psicológica en contra de la escuela, la policía y las autoridades judiciales de la ciudad costera de Cayo Hueso.
El abogado de la madre de familia calificó el hecho como indignante e inconstitucional, además de señalar que el procedimiento seguido por el oficial fue innecesario: “Las esposas ni siquiera le servían. Se imaginan qué tenían en su mente, qué debió pensar”, abundó.