No seré rehén ni instrumento político: ministro Zaldívar
Nada mancharía más mi legado que ceder a presiones que buscan eliminar imparcialidad, afirma; ‘la división de Poderes no se defiende a tuitazos’
Afirma contundente: “Para quienes claman que el presidente de la Corte tome partido en la arena partidista y sume su voz a la de un sector de la sociedad, les reitero que eso no va a suceder.
“No seré rehén de quienes quieren convertir la independencia judicial en arma política. No voy a permitir que se me utilice como instrumento político”.
En entrevista, el hombre de leyes pide valorar el gran calado de la reforma aprobada para el Poder Judicial. Se dice, convencido, que nada mancharía más su legado que ceder a las presiones que a toda costa buscan hacerlo perder su imparcialidad.
Después de la polémica generada por el empuje en el Congreso de una extensión a su gestión como presidente de la Suprema Corte y el CJF, ¿cuál diría que es el ánimo de sus pares?, ¿ha afectado este tema la relación entre ministros?
—Lo primero que hay que decir es que la reforma legal aprobada el día de ayer es la más trascendente desde 1994.
Es una reforma de gran calado que sienta las bases para un poder judicial renovado y fortalecido, que cumpla con la promesa de alcanzar una justicia más igualitaria, más accesible, más cercana a la gente.
El paquete de reformas fortalece la carrera judicial, se democratiza la justicia constitucional con el sistema de precedentes, se fortalece la defensoría pública y se dinamiza la carrera judicial para crear un nuevo perfil de juzgador y combatir de mejor manera la corrupción y el nepotismo.
En el Poder Judicial estamos agradecidos con los legisladores por haber acompañado este esfuerzo de colaboración de Poderes y por haber generado un amplio consenso.