Durante marzo de 2025, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) en México registró un aumento anual de 3.80%, la cifra más elevada desde diciembre de 2024, cuando alcanzó un 4.21%. Este repunte en la inflación general sugiere presiones crecientes sobre los precios al consumidor.
En comparación con febrero, la inflación mensual fue de 0.31%, el mayor incremento para un marzo desde 2022 (0.99%). La inflación subyacente mensual fue de 0.43%, el menor aumento en un mes de marzo desde 2020 (0.29%), mientras que la inflación no subyacente presentó una ligera baja de -0.08%, menor que las registradas en marzo de 2023 y 2024.
– Servicios (subyacente): Subieron 0.41%, siendo la menor alza en un mes similar desde 2020, pero dentro del rango típico de los últimos diez años (0.44%).
– Agropecuarios (no subyacente): 0.41%, la mayor desde 2022 (1.23%). Cabe mencionar que es la primera inflación positiva para un mes igual, después de que en marzo del 2023 y del 2024 se observaran inflaciones negativas de 0.67% y 0.53%. Este subcomponente se ubicó ligeramente por debajo del promedio mensual para el mismo mes en los últimos 10 años (0.43%).
– Energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno (no subyacente): -0.45%, la primera inflación negativa para un mismo mes desde 2023 (-0.36%).
Los datos de marzo señalan que la inflación podría desacelerarse en los siguientes meses por menores presiones en el sector servicios. Sin embargo, preocupa la presión en el componente de mercancías, donde podría estarse reflejando la depreciación y aumento de la volatilidad del tipo de cambio.
Además, la inflación de México podría verse presionada al alza en el subcomponente de mercancías por el aumento de precios en Estados Unidos ante la entrada en vigor de los aranceles recíprocos.